Política
Aerolíneas Argentinas logra superávit y optimiza su futuro
¿Sabías que Aerolíneas Argentinas logró un superávit de USD 20,2 millones en el resultado operativo durante 2024? Este cambio de rumbo en la aerolínea de bandera marca un hito importante, ya que es el primer saldo positivo desde su estatización en 2008. Pero, ¿cómo logró la empresa revertir su histórico rojo y qué significa esto para el futuro de la compañía? Te lo contamos a continuación.
El cambio de enfoque: eficiencia y sostenibilidad financiera
El superávit de Aerolíneas Argentinas es el resultado de varias decisiones estratégicas clave. Según Fabián Lombardo, el titular de la aerolínea, la mejora operativa se debió a la cancelación de rutas no rentables, una mayor productividad y la reducción del personal mediante retiros voluntarios. En total, 1.600 trabajadores aceptaron los retiros voluntarios, lo que llevó a una caída del 13% en la nómina de empleados y la eliminación de 85 cargos jerárquicos.
Esto no solo ayudó a reducir costos, sino también a mejorar la eficiencia operativa, lo que permitió a la empresa mantener una deuda consolidada un 25% más baja sin afectar sus niveles de caja.
Los retiros voluntarios como estrategia de reestructuración
Los retiros voluntarios han sido una de las principales herramientas de la compañía para reducir costos. La aerolínea gastó USD 63 millones, mayoritariamente destinados a financiar estos retiros, con el fin de hacer más sustentable la operación de Aerolíneas Argentinas. Fabián Lombardo mencionó que, con este cambio, la empresa no dependerá más del Tesoro Nacional para su financiamiento, proyectando que en 2025 no necesitará recursos adicionales del Estado.
Aerolíneas Argentinas y la privatización: un paso hacia el futuro
La optimización de costos y la mejora en los resultados operativos están alineadas con los planes de los directivos, que buscan hacer de Aerolíneas Argentinas una empresa más eficiente y rentable para facilitar una posible privatización. Con estos logros, la compañía se acerca cada vez más a los estándares de la industria y se posiciona como un activo valioso para sus accionistas.
¿Y qué pasa con el mercado?
A pesar de la leve caída en la cantidad de pasajeros registrada en enero, los ingresos de la aerolínea aumentaron un 9,5% interanual. Esta cifra contrasta con la pérdida de participación de mercado en el segmento de cabotaje e internacional debido a la desregulación aerocomercial impulsada por el nuevo Gobierno.
Un pasado complejo: el déficit y la gestión anterior
Es importante destacar que el resultado operativo de 2024 contrasta con el de 2023, cuando Aerolíneas Argentinas reportó un déficit de USD 220 millones, a pesar de haber recibido más de USD 500 millones por ganancias extraordinarias por la brecha cambiaria. En ese momento, la compra de dólares para afrontar gastos corrientes al tipo de cambio oficial y la venta de pasajes al tipo de cambio MEP generaron beneficios financieros.
Este déficit se sumó a los 16 años consecutivos de pérdidas operativas, con un promedio de USD 400 millones anuales en el indicador EBIT, que mide las ganancias antes de intereses e impuestos.
El litigio por la estatización
Además, la compañía se enfrenta a un desafío legal importante. Argentina está apelando un fallo del CIADI que obliga al país a pagar USD 390 millones al fondo Titan Consortium, que compró los derechos del litigio. Este juicio es un legado del proceso de estatización de la aerolínea, que fue criticado por no seguir los procedimientos legales adecuados.
¿Qué nos depara el futuro?
Con un superávit y una estrategia de optimización en marcha, Aerolíneas Argentinas podría estar dando pasos firmes hacia una reestructuración que permita privatizarla en el futuro. Sin embargo, los retos legales y las fluctuaciones en el mercado seguirán siendo factores claves a monitorear.
Este cambio de rumbo de Aerolíneas Argentinas muestra cómo una gestión eficiente y decisiones estratégicas pueden transformar una situación financiera compleja en una oportunidad para el futuro. Sin duda, un caso que será seguido de cerca en los próximos años.