Política

Captura internacional por genocidio en Myanmar

¿Sabías que la justicia internacional puede perseguir crímenes cometidos en otro país? Este es el caso de María Servini, quien hoy ha ordenado la captura internacional de 25 ex funcionarios y líderes militares de Myanmar, entre ellos el expresidente Htin Kyaw, por crímenes de lesa humanidad y genocidio contra los rohingya. Este es un caso que pone de manifiesto cómo la justicia global busca responsables por actos atroces, incluso cuando ocurren lejos de nuestras fronteras.

La jueza María Servini tomó esta decisión luego de una solicitud presentada por el fiscal federal Guillermo Marijuán. En su resolución, la magistrada dio lugar al pedido del fiscal, quien el año pasado había reclamado estas detenciones, basándose en el principio de justicia universal, que permite que un país juzgue crímenes cometidos fuera de su territorio.


¿Qué ocurrió en Myanmar con los rohingya?


Entre 2012 y 2018, Myanmar fue escenario de una serie de atrocidades cometidas contra los rohingya, una minoría étnica musulmana. Los crímenes incluyen violaciones, matanzas y la destrucción de aldeas enteras, forzando a miles de rohingyas a huir hacia Bangladesh, donde se encuentran en campamentos de refugiados. Aunque los rohingyas han vivido en Myanmar durante generaciones, el gobierno de ese país no los reconoce como ciudadanos, dejándolos en una situación de apatridia.

La denuncia que dio origen a esta orden de captura fue presentada en 2019 por Maung Tun Khin, presidente de la "Burmese Rohingya Organization UK" (BROUK). Khin y su familia huyeron de Myanmar en 1990 debido a la represión que sufrían los rohingya a manos del ejército birmano, conocido ahora como el ejército de Myanmar.


¿Quiénes están involucrados?


La orden de captura internacional incluye a 25 personas, entre ellas, comandantes de alto rango y ex ministros del gobierno birmano, como el expresidente Htin Kyaw. Estos individuos son acusados de ser responsables de crímenes contra la humanidad y genocidio en su país. Según las autoridades, estos crímenes vulneran los derechos humanos establecidos por el derecho penal internacional, y deben ser juzgados por la comunidad global.

La jueza María Servini señaló que, debido a la gravedad de los hechos y a los fallos de la Cámara Federal, estos crímenes deben ser procesados en Argentina. Nuestro país tiene la facultad de investigar y juzgar este tipo de crímenes gracias al principio de jurisdicción universal, que está consagrado constitucionalmente.


Un paso hacia la justicia global


El caso de Guillermo Marijuán y María Servini pone en evidencia cómo los crímenes internacionales, como los cometidos contra los rohingya, no deben quedar impunes, sin importar en qué lugar del mundo ocurran. Aunque Myanmar no ha investigado estos hechos, el esfuerzo internacional sigue avanzando.

Este proceso es solo una parte de una batalla más grande por la justicia global. Los esfuerzos para llevar a los responsables ante la justicia son fundamentales para evitar que los crímenes de lesa humanidad y genocidio se repitan en el futuro.