Política
¿Por qué se despidieron a policías bonaerenses?
En las últimas horas, el gobierno de Axel Kicillof, líder del oficialismo kirchnerista, tomó una decisión que está generando un gran revuelo en la provincia de Buenos Aires. En un contexto de creciente malestar dentro de la Policía Bonaerense, 18 efectivos fueron desvinculados y acusados penalmente por su participación en protestas relacionadas con condiciones laborales y salariales.
La medida tiene que ver con un reclamo de los agentes, que prestaban servicio en Ituzaingó y Tres de Febrero, quienes fueron suspendidos tras manifestarse por mejoras en sus salarios y condiciones de trabajo. A este proceso se le sumó la denuncia judicial por el supuesto “delito de sedición”, una acusación que agrava aún más la situación.
¿Qué pasa con la seguridad en la provincia?
La desvinculación de estos policías podría tener un impacto directo en la seguridad de los bonaerenses. En una entrevista con el medio La Nación, Rodrigo Tripolone, abogado defensor de los oficiales despedidos, señaló que hay zonas de la provincia que han quedado sin cobertura debido a la falta de efectivos en servicio. Según el letrado, Ituzaingó fue uno de los lugares afectados, ya que no hubo personal suficiente para patrullar durante el turno completo.
Este contexto de vacíos en la cobertura policial genera preocupación, sobre todo cuando se habla de la creciente inseguridad que afecta a los vecinos. Rodrigo Tripolone denunció que la decisión de Axel Kicillof de desvincular a los oficiales, en lugar de solucionar los problemas de la fuerza, los agrava, dejando a los ciudadanos más vulnerables.
¿Qué reclaman los policías bonaerenses?
El malestar de la Policía Bonaerense no es algo nuevo. Durante las protestas, los agentes dejaron en claro sus exigencias: un aumento salarial significativo, mejores condiciones laborales y una serie de beneficios sociales. Entre las demandas más destacadas se encuentran:
- Un sueldo inicial de $1.600.000 para los nuevos agentes.
- Aumento de las horas extras (denominadas "Cores").
- La posibilidad de retirarse con el 100% del salario tras 25 años de servicio.
- Provisión de uniformes y mejoras en las condiciones de trabajo.
Además, el actual sueldo base de un agente es de aproximadamente $600.000, lo que no alcanza ni para cubrir los costos básicos de vida, según los mismos efectivos. Los oficiales también piden la reincorporación de aquellos que fueron sancionados en protestas anteriores y el fin de las represalias.
Amenazas y aprietes a quienes defienden a la Policía Bonaerense
La situación se complica aún más cuando Rodrigo Tripolone denunció amenazas hacia él y los oficiales que están defendiendo sus derechos. En un impactante testimonio, reveló que una policía retirada, Gabriela, habría recibido amenazas de muerte si no desistía de reclamar por los derechos de sus compañeros. Esta denuncia fue realizada a través de las redes sociales, donde Tripolone dejó claro que las represalias por alzar la voz van más allá de lo esperado.
Conclusión: ¿Cómo afecta esta crisis a la seguridad de los bonaerenses?
La desconfianza en el gobierno de Axel Kicillof y en su gestión de la Policía Bonaerense crece cada vez más. La desvinculación de los policías y las acusaciones de abuso de poder generan incertidumbre sobre el futuro de la seguridad en la provincia. Mientras tanto, las demandas de los oficiales, que reclaman mejores condiciones laborales y salariales, no dejan de ganar apoyo. Solo el tiempo dirá cómo afectarán estas tensiones a la seguridad de los bonaerenses en el futuro cercano.