CABA

Estatales quieren paritarias y presionan a Kicillof por reducción de jornada laboral

En medio de un escenario de creciente inflación, los sindicatos de la provincia de Buenos Aires intensifican la presión sobre el gobernador Axel Kicillof para negociar paritarias y abordar la reducción de la carga horaria de los empleados estatales. Sin las transferencias discrecionales de los últimos cuatro años, Kicillof se enfrenta a negociaciones más ajustadas con los gremios.

El martes 9 de enero, el gobernador anunció la realización de una reunión con los gremios estatales para activar la mesa paritaria. Este anuncio siguió a la convocatoria de los sindicatos a la Comisión Técnica Salarial, donde se discutirá la actualización de haberes del último trimestre del año.

Además de la mejora salarial, los sindicatos buscan estabilidad laboral, proponiendo que la fecha límite para la incorporación de trabajadores a la planta permanente del Estado sea el último día de diciembre de 2023.

Destacando en la agenda sindical, se encuentra la propuesta de reducir la carga horaria. Los gremios argumentan que es necesario discutir la reducción de la jornada laboral sin pérdida de poder adquisitivo para los empleados estatales.

Aunque la ley 10.430 establece formalmente jornadas de mayor carga horaria, la mayoría de los estatales cumple con una jornada laboral de 30 horas semanales (seis diarias). ATE, uno de los sindicatos involucrados, sostiene que la intención es achicar la jornada laboral sin pérdida de derechos.

Los gremios consideran que la reducción de la jornada laboral podría propiciar el ingreso de más empleados públicos a las estructuras del Estado bonaerense. Buscan aprovechar la relación favorable que mantienen con Kicillof en estas negociaciones.