Legislatura bonaerense debate la Boleta Única: ¿Cómo cambiará la política en los barrios?

La Legislatura de la provincia de Buenos Aires anticipa un debate que podría cambiar el sistema electoral provincial. A partir de la reciente aprobación de la Boleta Única a nivel nacional, los bloques opositores en Buenos Aires —integrados por UCR-Cambio Federal, CC, y PRO— han presentado un proyecto que impulsa su implementación en las próximas elecciones provinciales. Alejandro Dichiara, presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, se mostró abierto a discutir su adhesión, aunque advierte que el consenso será clave para su aprobación.

Desde el lado de la UCR, el cambio hacia la Boleta Única es visto como un avance hacia una mayor transparencia y modernización de la democracia. Este sistema dejaría atrás las tradicionales listas de boletas partidarias, lo que, según la oposición, evitaría la entrega de prebendas en las campañas barriales. Sin embargo, no todos concuerdan en este aspecto. Un dirigente del primer cordón bonaerense considera que las afirmaciones de la oposición subestiman a la gente. “No estamos en una época donde la boleta o la prebenda define el voto en las grandes ciudades”, sostuvo.

Desde el sur bonaerense, se argumenta que, a pesar de las suspicacias históricas sobre la transparencia en la distribución de boletas, el sistema electoral tradicional también permite una elección consciente. Para muchos en el peronismo, las elecciones reflejan la voluntad de un electorado informado que prioriza el contexto económico y social sobre cualquier estrategia política en el cuarto oscuro.

La Boleta Única, según sus impulsores, podría evitar esas “prácticas obsoletas” al centralizar las opciones electorales en una sola lista, simplificando el voto y evitando el desvío de intenciones políticas. Sin embargo, voces de diferentes bloques peronistas han sido escépticas sobre su verdadero impacto. “No vamos a perder el territorio por una boleta más o menos”, afirman desde uno de estos bloques, subrayando que el cambio podría tener más un efecto estético que sustancial en el fondo de la política barrial.

El Frente Renovador, aunque también crítico, se mantiene firme en su disposición a adaptarse si la Boleta Única se implementa, afirmando que el cambio de modalidad no disminuirá su capacidad de hacer campaña efectiva.

Un sector de la política bonaerense equipara el cambio al impacto que generaron las redes sociales en su momento: “No fue fácil adaptar nuestra forma de comunicar en redes, pero lo hicimos”, expresó un diputado. La Boleta Única, por lo tanto, representa otro desafío para el cual la clase política está dispuesta a adaptarse, incluso si no están de acuerdo ideológicamente con el sistema.

Mientras las conversaciones avanzan, la implementación de la Boleta Única plantea cuestiones profundas sobre la política en los barrios. ¿Terminará la Boleta Única con las viejas prácticas electorales o simplemente las reemplazará por nuevas estrategias de campaña?