Mauricio Macri conversó con tuiteros este jueves 26 de mayo al participar en un intercambio organizado por Espacio Republicano, evento que contó con una transmisión en vivo a través e Twitter Spaces. Durante la charla, el ex presidente apuntó contra un sector de la Iglesia que -a su modo de ver- "jugó políticamente mal" con la 'Mesa del Hambre' y aseguró que "la gente se va a entusiasmar" ante la perspectiva de un posible cambio de gobierno en 2023.

El líder del PRO acepto la invitación de Espacio Republicano, una organización que viene dialogando con varios referentes del arco opositor. En esta oportunidad el invitado fue Mauricio Macri, quien conversó distendidamente sobre una variedad de temas desde su vivienda de Acassuso, mientras permanecía atento al duelo de Boca Juniors con Deportivo Cali.

Esta noche a partir de las 22hs, en una edición especial e histórica de #EspacioRepublicano, conversará con nosotros el ex Presidente de la Nación, Mauricio Macri @mauriciomacri. Convocamos a toda la comunidad de twitter a ser parte del mismo. ¡Los esperamos! pic.twitter.com/QmyAYEcBmo

— Espacio Republicano (@EspacioRep) May 26, 2022

Macri sostuvo que si hubiese gobernado desde la Casa Rosada durante la pandemia, hubiera buscado “empoderar a los argentinos”. Sin embargo, admitió que una gestión en el contexto de la crisis del Covid-19 no hubiera sido sencilla a raíz de "la irracionalidad" del kirchnerismo: “Siempre tuvieron una oposición destructiva, todo el tiempo agitando el helicóptero, las 14 toneladas de piedra, no quiero pensar lo que hubiera sido administrar semejante crisis”, recalcó.

El ex mandatario admitió que no volvió a conversar con el Papa Francisco tras la finalización de su mandato presidencial. Al mencionar a la Iglesia el referente del PRO manifestó una crítica: “Hubo una parte de la Iglesia que jugó políticamente mal con la ‘Mesa del Hambre”, aseveró. “Creo que la mayoría de la institución valoraba esta estructura sana que habíamos traído después de tanta oscuridad, aún sin entender el cambio económico que proponíamos”, argumentó.

Tampoco olvidó renovar su valoración negativa del gobierno de Alberto Fernández y definió al oficialismo como un “Ejército de demolición”, aludiendo a la interna que sacude al Frente de Todos. En paralelo, responsabilizó a la gestión actual de haber "destruido" todas las conquistas durante el gobierno de Cambiemos. “Y todas las cosas que no pudimos resolver, que básicamente las habíamos heredado de ellos, las empeoraron", sentenció.

Se diferenció asimismo de la política exterior del Frente de Todos, con especial énfasis en la relación con Venezuela y la guerra en Ucrania. Macri reflexionó sobre el "impacto" a futuro que tendrán dichos posicionamientos en caso de un regreso de la oposición al poder en 2023: “Nos dosificarán los apoyos, no van a ser tan bestiales como lo fueron entre 2015 y 2019, pero el mundo nos va apoyar”.

Macri y la controvertida relación con los gobernadores

Consultado por su relación con los gobernadores, el ex jefe de Estado reconoció que centró sus esfuerzos en apostar por "un modelo de desarrollo y de ordenamiento económico", pero que no negoció correctamente con los mandatarios provinciales. Sin embargo, "fue en el intento de transmitir un gobierno realmente democrático y federalista".

Asimismo remarcó que finalizó su gestión habiéndole cumplido "a los gobernadores, a los intendentes, con todas las deudas que había acumulado del kirchnerismo”. Incluso, “la mayoría de los gobernadores dejaron de tener déficit”, recordó.

Sin embargo, también expresó sus críticas a los gobernadores, quienes "colaboraron poco y nada", opinó, en el momento de impulsar "las reformas profundas" que el país necesitaba. "Es un aprendizaje para el segundo tiempo", deslizó, sin perder de vista el escenario electoral del 2023.

"Vamos a poner los huevos sobre la mesa"

“Soñaba con dar vuelta la situación entera de la Argentina y un cambio de verdad como lo hice en Boca y en la Ciudad, pero nos faltó tiempo”, expresó Mauricio Macri, al reflexionar sobre su gestión desde la Casa Rosada.

“Tenemos que mantener el eje y hacernos cargo de la esperanza, frente a la bronca y la angustia de la sociedad. Cuando estemos más cerca de un posible cambio de gobierno, la gente se va a entusiasmar”, consideró con respecto a la posibilidad de un "segundo tiempo".

Al mismo tiempo, se mostró optimista porque "la gente", desde su óptica, comprende mejor los límites del Estado: “La gente entiende más. Ya se dio cuenta que aquellos que le decía que el Estado les iba a resolver todo, en realidad se aprovecharon de él”, alegó.

"Vamos a poner los huevos sobre la mesa”, arengó Mauricio Macri hacia el final, tras aludir al compromiso de la dirigencia política con los jóvenes.