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Milei, enamorado de Scioli, le creó a medida la secretaría de turismo, ambiente y deportes

En un nuevo movimiento estratégico, el Gobierno nacional, encabezado por el presidente Javier Milei, oficializó hoy la fusión de los ex ministerios de Ambiente y de Turismo y Deportes en una única entidad: la "Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes". A través del decreto 33/2024, publicado en el Boletín Oficial, se formaliza esta reorganización que implica una reducción de estructuras ministeriales, en línea con la política de austeridad y reducción del gasto político.


La “Secretaría de Turismo, Ambiente y Deportes”, que tendrá tres subsecretarios, uno para cada área, se sabe que Yanina Martínez se haría cargo del futuro de la industria turística; mientras que Daniel Scioli sería el titular de la secretaría. El acuerdo entre el león y el manco, se habría cerrado el fin de semana pasado en Mar del Plata, cuando Javier Milei viajó a ver a su pareja Fátima Flórez en el teatro.


La nueva secretaría estará bajo la jurisdicción del ministro del Interior, Guillermo Francos, consolidando así tres nuevas competencias bajo su liderazgo. La medida incluye la transferencia de organismos descentralizados vinculados a cada área, como la Administración de Parques Nacionales y el Instituto Nacional de Promoción Turística.

Con la fusión, el organismo contará con tres subsecretarios, uno para cada función (Turismo, Ambiente y Deportes). El decreto establece que, mientras se concluya con la reestructuración, se mantendrán las estructuras de nivel inferior a subsecretaría y se conservará el gasto comprometido.

A pesar de las controversias respecto a la temática ambiental en la gestión de Milei, el nuevo organigrama establece misiones que incluyen contribuir a alcanzar los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) y elaborar políticas relacionadas con la mitigación y adaptación climática.

Este cambio forma parte del proyecto de "Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos", enviado para su tratamiento en sesiones extraordinarias del Congreso. Las reformas propuestas han generado críticas por parte de organizaciones ambientales y sociales, argumentando que suponen retrocesos en la legislación ambiental y disminución de los niveles de protección alcanzados.