Prófugos brasileños del intento de golpe de Estado a Lula buscan refugio político en Argentina

Al menos siete ciudadanos brasileños, prófugos de la justicia y condenados por su participación en el intento de golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, han iniciado los trámites para solicitar refugio político en Argentina. La Comisión Nacional de Refugiados, dependiente de Migraciones, recibió la solicitud formal.

Según información obtenida, los solicitantes, compuestos por cuatro hombres y tres mujeres, se presentaron "muy bien vestidos" argumentando ser perseguidos políticos del gobierno brasileño. Los nombres en la lista incluyen a Ângelo Sotero, Gilberto Ackermann, Raquel de Souza Lopes, Luiz Fernandes Venâncio, Rosana Maciel Gomes y Daniel Luciano Bressan. Estos individuos ingresaron ilegalmente a Argentina a través de pasos no habilitados, como el Puente Internacional General San Martín que conecta Gualeguaychú con Fray Bentos, entre el 5 y el 21 de mayo.

La embajada de Brasil ya ha entregado a la Cancillería argentina un listado con casi 100 nombres de prófugos, solicitando confirmación sobre su presencia en el país. Sin embargo, fuentes cercanas a la situación indican que Argentina no tiene un plazo específico para responder, lo que podría dilatar el proceso considerablemente.

Esta situación plantea un dilema delicado para el presidente argentino, Javier Milei, quien debe balancear las demandas de extradición de las autoridades brasileñas y la Corte Suprema de Justicia con las presiones del bolsonarismo que reclama protección para los prófugos.

Eduardo Bolsonaro y otros cuatro diputados de derecha de Brasil visitaron Argentina para participar en un evento organizado por la libertaria María Celeste Ponce, lo que subraya la estrecha relación entre ciertos sectores políticos de ambos países. Esta conexión podría complicar aún más el ya tenso vínculo bilateral.

Los condenados, quienes habían roto las tobilleras electrónicas impuestas por el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, se refugiaron en Argentina y Uruguay. En respuesta, el Fiscal General de Brasil, Paulo Gonet, solicitó a Interpol la emisión de alertas rojas para facilitar su captura y extradición.

Desde la cancillería brasileña, fuentes indicaron que no tienen información detallada debido a la naturaleza clasificada de los datos por parte del gobierno argentino, aunque están atentos a los desarrollos.

En paralelo, se reporta que Lula da Silva habría decidido evitar una fotografía con Milei hasta que se resuelva esta potencial crisis diplomática. Desde el entorno de Lula, se espera que la diplomacia y la sensatez prevalezcan.

Este escenario pone a Milei en una situación complicada, especialmente después de que el gobierno brasileño ayudara significativamente a resolver la crisis de gas en Argentina. Aceptar la solicitud de la familia Bolsonaro podría representar una línea roja con repercusiones de largo alcance.

Además, Brasil espera una colaboración similar por parte de Uruguay y Paraguay, que también albergan prófugos relacionados con este caso. La semana pasada, durante la visita del ministro de Justicia de Brasil a Asunción, Ricardo Lewandowski, Brasil y Paraguay reafirmaron su compromiso de cooperación, incluida la extradición de personas buscadas por las autoridades judiciales, sugiriendo que esta situación estuvo presente en las discusiones.