El kirchnerismo impulsa su propia reforma laboral

¿Qué hay realmente detrás del nuevo proyecto de reforma laboral que impulsa el kirchnerismo? Esa es la pregunta que muchos se hacen mientras el texto empieza a circular por el Congreso.

17-12-2025 - Por Crítica Argentina

¿Qué hay realmente detrás del nuevo proyecto de reforma laboral que impulsa el kirchnerismo? Esa es la pregunta que muchos se hacen mientras el texto empieza a circular por el Congreso. La iniciativa se presenta como una defensa de los trabajadores, pero su letra chica abre un debate que vuelve a poner en tensión a la economía argentina y al mercado laboral. Acá te lo explicamos, simple y directo.

El kirchnerismo presentará en el Congreso un proyecto propio de reforma laboral kirchnerista, pensado como una contracara directa del plan de modernización que impulsa el gobierno de Javier Milei. La propuesta cuenta con el aval político de Cristina Kirchner y el respaldo de sectores sindicales de la CGT y la CTA, y busca instalar lo que sus autores llaman una “contrarreforma”.

Cristina Kirchner apeló la ejecución de sus propiedades y las de sus hijos  en la causa “Vialidad” - Nuevos Papeles

Según sus impulsores, el objetivo es defender “derechos laborales” y revertir el deterioro salarial. Sin embargo, distintos analistas advierten que el contenido del proyecto podría generar más costos para las empresas y agravar problemas estructurales del empleo formal, que la Argentina arrastra desde hace décadas.

El borrador fue coordinado desde la Secretaría de Relaciones Laborales del Partido Justicialista, encabezada por la diputada Vanesa Siley, y articulado con senadores de Unión por la Patria como Mariano Recalde y Anabel Fernández Sagasti. La estrategia es clara: unificar a la oposición en ambas cámaras y confrontar de lleno con el diagnóstico del oficialismo sobre salarios, empleo y productividad.

La propia Siley lo explicó sin rodeos: “Lo primero que vamos a plantear es un diagnóstico”. Y agregó que el proyecto del Gobierno parte de una idea que, según ellos, es falsa: que flexibilizar el trabajo genera empleo registrado. Esa discusión será el eje central del debate parlamentario.

Desde el espacio K sostienen que la reforma laboral que propone Javier Milei no va a crear empleo, sino que provocará una pérdida de derechos. A partir de esa mirada, plantean que los bajos salarios empujan a la pluriactividad, la informalidad y al crecimiento del trabajo en plataformas digitales.

Con ese diagnóstico, el proyecto incluye varias medidas: un aumento fuerte del Salario Mínimo, Vital y Móvil para cubrir la Canasta Básica Total, la reducción de la jornada laboral, la ampliación de licencias y nuevas regulaciones para el trabajo en plataformas. En los hechos, estas iniciativas implicarían mayores costos para los empleadores, algo que, según economistas, podría dejar a más trabajadores fuera del sistema formal.

Uno de los puntos más discutidos es la reducción de la jornada semanal de 48 a 42 horas, con la meta de llegar a 40 en el mediano plazo. El kirchnerismo sostiene que los avances tecnológicos permiten trabajar menos sin afectar la producción, una afirmación que genera dudas en gran parte del sector privado argentino.

También se propone ampliar la licencia por paternidad a 90 días, igualándola con la materna, y promover paritarias sin topes ni condicionamientos, en contraposición al enfoque oficial que busca vincular salarios con productividad.

 

En síntesis, la reforma laboral kirchnerista plantea un modelo más regulado del mercado de trabajo. Lejos de cerrar el debate, vuelve a poner sobre la mesa una discusión clave: cómo generar empleo y mejorar salarios sin seguir golpeando a una economía argentina que ya está al límite. Esa será la verdadera pelea que se viene en el Congreso.