La presión de LLA obligó a la Ciudad a bajar impuestos en el Presupuesto 2026

Hay un detalle del Presupuesto 2026 de la Ciudad de Buenos Aires que quedó medio tapado entre tantos números… y que puede cambiar bastante...

04-12-2025 - Por Crítica Argentina

Hay un detalle del Presupuesto 2026 de la Ciudad de Buenos Aires que quedó medio tapado entre tantos números… y que puede cambiar bastante el bolsillo de miles de vecinos. Pero antes de llegar a ese punto —el más importante—, hace falta entender cómo se llegó a esta votación maratónica que terminó recién el viernes a la mañana.

El dato principal es simple: el Presupuesto salió con superávit y con varias reducciones impositivas, pero esas bajas no estaban en el plan original del gobierno de Jorge Macri. Aparecieron después de una negociación fuerte, donde La Libertad Avanza dejó claro que no iba a acompañar nada si no se incluían alivios fiscales concretos, alineados con la agenda nacional de Javier Milei.

Javier Milei celebra un superávit trimestral que tambaleó en marzo

Y acá empieza el loop: todo lo que hoy se comunica como una “decisión del Gobierno porteño” nació, en realidad, de una presión directa. ¿Qué implicó esa presión? ¿Y a quiénes beneficia? Vamos por partes.


Cómo se destrabó la votación


Después de horas de rosca, el oficialismo consiguió los 38 votos necesarios. Pero la condición clave vino del bloque libertario. Según contó la presidenta del espacio, Pilar Ramírez, aceptaron acompañar “porque esta vez hubo una escucha real” del jefe de Gobierno.

Esa escucha tuvo un precio: bonificaciones en Ingresos Brutos, alivios para monotributistas, actualizaciones de escalas y exenciones del Impuesto de Sellos. Todo eso entró por exigencia directa de LLA.


Qué cambios impositivos se aprobaron


Las reformas más importantes quedaron así:

  • Bonificación del 100% en Ingresos Brutos para las primeras tres categorías del Régimen Simplificado.

  • Bonificación del 75% para las cinco categorías siguientes.

  • Exenciones más amplias para Fondos Comunes de Inversión.

  • Actualización del 20% en los umbrales de facturación, para evitar saltos de escala injustos.

  • Reducción del Impuesto de Sellos al 2,70% para operaciones inmobiliarias de hasta $226 millones.

  • Exención total de Sellos para créditos hipotecarios destinados a primera vivienda.

  • Exención de Sellos para consumos con tarjeta.

Son medidas que apuntan a aliviar la carga fiscal sobre sectores chicos y medianos, mientras que el Gobierno porteño mantuvo el resto del esquema proyectado para 2026: crecimiento del 5%, inflación del 10,1% y un dólar estimado en $1.423. El resultado final anticipa un superávit de $6 mil millones.


El punto que queda flotando


 

Aunque el oficialismo logró aprobar su Presupuesto, la señal política es clara: las reducciones impositivas no surgieron de la planificación interna, sino de la presión de La Libertad Avanza. Y eso deja abierta una pregunta para los próximos meses: si este fue el nivel de influencia en un presupuesto completo, ¿cuánto más podrá condicionar LLA la política fiscal de la Ciudad bajo la sombra de Javier Milei?