¿Puede un resultado electoral cambiarlo todo dentro del Gobierno y al mismo tiempo no afectar a sus principales líderes? Esa es la intriga que rodea a Martín Menem tras las elecciones legislativas 2025, y la respuesta está más cerca de lo que muchos piensan.
Tras la histórica victoria de La Libertad Avanza en todo el país, varios se preguntaban si la presidencia de la Cámara de Diputados corría peligro para Menem. Sin embargo, el propio dirigente aclaró que “nunca estuvo en juego” y descartó que otra fuerza aliada, como el PRO, pueda quedarse con ese cargo.
“La elección es un respaldo al trabajo de estos dos años, pero mi lugar es de La Libertad Avanza y eso no cambia”, aseguró en diálogo con LN+.
Las dudas sobre su continuidad surgieron tras la derrota en la provincia de Buenos Aires y las críticas al armado de la campaña. Esto generó especulación sobre posibles cambios en el Gabinete, especialmente pensando en los acuerdos necesarios para impulsar las reformas que el Gobierno busca desde Casa Rosada. Menem, sin embargo, dejó claro que cualquier modificación depende del presidente y que la presidencia de Diputados “le corresponde a La Libertad Avanza, la fuerza gobernante”.
Sobre los partidos que antes apoyaban al Gobierno, Menem explicó que “cuando se acercan las elecciones, algunos se diferencian y terminan votando en contra en temas que antes apoyaban. La política es dinámica”. Y agregó que la estrategia de La Libertad Avanza fue construir un partido sólido en todas las provincias, con base en ideas, no solo en ganar elecciones.
En la misma línea, destacó la participación de la fuerza en los 24 distritos del país, y cómo eso fortalece la presencia del partido de cara a 2027. “Arrancamos de cero y llegamos a todo el territorio. Esto nos permite sostener nuestras propuestas de liberalismo, baja de impuestos y agenda violeta”, aseguró.
Respecto al trabajo interno, Menem minimizó diferencias dentro del Gobierno: “Siempre logramos ponernos de acuerdo. La estrategia la marca Karina Milei y se ejecuta con Lule Menem. Esto no impide colaborar juntos”. Además, destacó la importancia de Santiago Caputo, “un hombre clave que cuenta con la confianza del presidente”.
De cara al Congreso que asumirá el 10 de diciembre, Menem subrayó que la prioridad serán la reforma laboral y la tributaria. “Vamos a necesitar acuerdos, partiendo de lo que ya teníamos antes de la elección, sumando las propias bancas de La Libertad Avanza y las del PRO. Estaremos cerca de 108 a 110 diputados”, indicó.
Finalmente, aseguró que la elección reafirma el compromiso del Gobierno con el país: “Más o menos bancas no cambian nuestra responsabilidad de cambiar la Argentina. Es momento de dar vuelta la página, dejar los egos de lado y seguir trabajando. El Pacto de Mayo sigue siendo nuestra hoja de ruta”.
Con esta claridad sobre su rol y la estrategia de La Libertad Avanza, queda en evidencia que la presidencia de la Cámara de Diputados está segura, pero la política sigue moviéndose y los próximos pasos marcarán el rumbo del Gobierno en el Congreso.