¿Por qué esta semana puede marcar un giro clave para el futuro político de los libertarios? La respuesta arranca hoy mismo, pero se definirá en los próximos días. Hay algo en el aire: una movida que no solo busca instalar figuras nuevas, sino también redibujar el mapa político rumbo a las elecciones porteñas. Y no se trata solo de nombres: lo que está en juego es el poder real en los distritos clave.

El presidente Javier Milei arranca la semana con todo. Esta vez no se queda en las redes: baja al territorio, se muestra, se junta con gente y activa con su candidato en CABA, Manuel Adorni, en plena antesala de las elecciones. El plan es claro: fortalecer La Libertad Avanza y dejar en claro quién manda en el espacio.

La primera parada es en el canal de streaming “La Misa”, donde Milei y Adorni van a charlar largo y tendido. No es casual: el streaming es el medio más fuerte entre los libertarios jóvenes. Ahí apuntan, y ahí quieren dejar un mensaje claro. ¿Cuál? Que Adorni es el elegido para representar al espacio, y no Ramiro Marra, desplazado por Karina Milei.

La estrategia es simple pero potente: caminar la calle como en 2021 y 2023, aunque esta vez Milei no esté en ninguna boleta. El miércoles saldrán de campaña, y aunque no se confirmó el lugar exacto por temas de seguridad, todo indica que será en Parque Centenario, barrio de Caballito. ¿El objetivo? Mostrar presencia, movilizar al votante propio y recordar que se viene una elección clave en mayo.

La frutilla del postre llegará el martes a la noche, con el Congreso de la Libertad Bonaerense. El evento, bautizado en broma como “Parejapalooza”, reunirá a más de 1200 libertarios para discutir propuestas y mostrar unidad. Estarán los pesos pesados del gabinete: Patricia Bullrich, Federico Sturzenegger, Karina Milei, Demian Reidel y Mariano Cúneo Libarona.

En paralelo, el PRO bonaerense se junta en su sede de Balcarce. Muchos querían ir al congreso libertario, pero tendrán que elegir. Las tensiones crecen y todos miran de reojo lo que pueda pasar en los próximos días.

En el Congreso, la cosa está más trabada. Desde ambos lados reconocen que no hay margen para grandes acuerdos. El único proyecto que parece avanzar es el de Ficha Limpia, que impediría que dirigentes con condena firme, como Cristina Kirchner, se postulen. Aunque algunos dudan de que el Senado lo apruebe.

El oficialismo se resigna a gobernar por decreto, mientras sigue apuntando a empresarios que suben los precios por encima de la inflación. “Van a tener que bajarse del pony con los márgenes de ganancia”, dicen en Casa Rosada.

Esta semana puede ser clave para entender cómo se va a mover el tablero político. Si algo tiene claro Milei, es que no va a esperar que lo ayuden desde el Congreso. Va por afuera. Y ya empezó.