El gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, uno de los políticos más longevos de la provincia, se enfrenta a un nuevo desafío en su carrera tras la reciente decisión de la Corte Suprema de Justicia de declarar inconstitucional la reelección indefinida. Esta sentencia ha marcado un antes y un después en el escenario político de la provincia, donde Insfrán ha gobernado durante 29 años, desde 1995, con una popularidad que ha oscilado entre el apoyo masivo y las críticas por su prolongada permanencia en el poder.
El 19 de diciembre de 2024, la Corte Suprema de Justicia dictaminó de forma unánime que el artículo de la Constitución de Formosa que permitía la reelección indefinida del gobernador violaba los principios democráticos y la separación de poderes. En otras palabras, la decisión judicial determinó que el sistema de reelección ilimitada podía generar una concentración de poder peligrosa para la democracia, al permitir que una misma persona gobernara durante períodos interminables.
Este fallo fue un golpe directo a la aspiración de Insfrán de mantenerse en el poder de manera indefinida. Aunque el fallo no obliga a Insfrán a dejar su cargo de inmediato, sí le impide postularse a una novena reelección. De hecho, el argumento central del fallo se centra en que el sistema de reelección indefinida "diluye la separación de poderes" y "atenta contra el principio democrático", tal como lo expresó la Corte en su resolución.
En Formosa, Insfrán ha gozado de una notable popularidad. En las elecciones de 2023, obtuvo más del 70% de los votos, lo que le permitió continuar su reinado político. Sin embargo, la posibilidad de una reelección indefinida ha sido objeto de controversia, ya que se considera que perpetuar a una misma persona en el poder por tanto tiempo puede derivar en prácticas autoritarias. El fallo de la Corte Suprema subraya la necesidad de limitar el poder para evitar concentraciones que puedan alterar el equilibrio democrático.
El Procurador General de la Nación, Eduardo Casal, también se pronunció en contra de la reelección indefinida, argumentando que el sistema republicano consagrado en la Constitución Nacional exige la limitación del poder. Según Casal, "la perpetuación en el poder erosiona el principio de separación de poderes" y va en contra del propósito fundamental del Estado de Derecho. Esta postura fue respaldada por la Corte Suprema, que ratificó la inconstitucionalidad del artículo de la Constitución de Formosa.
Ante este escenario, Insfrán ya ha planteado la posibilidad de una reforma constitucional en Formosa, proponiendo que se permita una sola reelección más, pero que se cuente a partir de 2027. Esta reforma le daría la oportunidad de gobernar durante dos períodos adicionales, manteniendo su influencia sobre la política provincial.
La decisión de la Corte Suprema de Justicia no solo afecta a Gildo Insfrán, sino que marca un precedente importante en la lucha por limitar la reelección indefinida en las provincias. La sentencia reitera la necesidad de respetar los principios democráticos y la separación de poderes, valores fundamentales que deben prevalecer en todas las esferas del poder público.
