Luis Caputo, ministro de Economía, destacó en la conferencia del CPAC el impacto de la "batalla cultural" impulsada por el presidente Javier Milei como motor para atraer inversiones internacionales. Durante su intervención, el funcionario anticipó una baja significativa de la inflación para 2024, que proyecta en un 20% anual, y logró los logros económicos alcanzados en el primer año de gobierno libertario.

Caputo enumeró hitos como la reducción del déficit fiscal, la caída de la brecha cambiaría a menos del 10% y la recomposición de las reservas internacionales. “Si hubiéramos dicho que lograríamos esto en tan poco tiempo, nadie lo habría creído”, afirmó. Además, aseguró que Argentina cerrará 2023 con un crecimiento proyectado del 5% para 2025, el más alto en 15 años.

Sin embargo, la exposición no estuvo exenta de polémica. Caputo trazó una línea divisoria al criticar a la izquierda por "multiplicar la pobreza y la corrupción", mientras ensalzó las políticas de derecha como la solución para el progreso. Según él, este cambio cultural es lo que posiciona a Argentina como un modelo global: "Hoy los ojos del mundo están puestos en nosotros".

La defensa de la "batalla cultural" como herramienta económica deja en claro el tono confrontativo del gobierno de Milei. ¿Es suficiente el discurso de autocomplacencia para consolidar los logros? La sociedad argentina enfrenta el desafío de equilibrar promesas con realidades, mientras la mirada del mundo sigue atenta.