Con total conocimiento del potencial cancerígeno y mortal del tóxico que emana del interior de las formaciones de subte (como es el caso del asbesto), Horacio Rodríguez LaRata emplea enormes partidas de presupuesto para tapar el problema en lugar de destinar esos fondos a la renovación de equipos que aseguren la protección sanitaria de los pasajeros.
El asbesto (amianto), que suele encontrarse en los revestimientos de los vagones y que afecta y provoca enfermedades a los trabajadores, también está afectando seriamente a quienes rutinariamente viajan en ese transporte.
El asbesto es un grupo de fibras y minerales usados para fabricar tejas, envases médicos, frenos, tanques de agua y tuberías. Su inhalación o manipulación causa cáncer de pulmón, laringe, ovario, mesotelioma y asbestosis. #ColombiaSinAsbesto #SaludPúblicaINC Comparte y apoya. pic.twitter.com/WUZKUkGomK
— INCANCEROLOGÍA (@INCancerologia) March 14, 2018
Está comprobada en otros países como España, la alta toxicidad y riesgo cancerígeno de esta sustancia e, incluso en la Argentina se investigó y comprobó la existencia de asbesto en cantidades importantes, como para adoptar medidas inmediatas de prevención y de remoción de tal sustancia.
En ese sentido, son conocidos los estudios de la investigadora del Departamento de Geología d ela Universidad Nacional del Sur, Leticia Lescano, quien desde hace años vienen analizando las muestras que le envían los trabajadores del Subte, determinando la presencia de asbesto, y muchos de esos informes han tenido repercusión en medios internacionales, salvo en medios porteños "donde Larreta pauta un peligroso silencio".
Fue a partir de esos estudios, realizados entre 2018 y 2019, que los metrodelegados profundizaron sus reclamos a la patronal –léase Larreta- para pedir urgentes medidas de protección porque, según remarcaron, habían fallecido tres compañeros de trabajo por la contaminación con asbesto.
La estadística negra se completa con al menos 84 trabajadores afectados y 6 enfermos de cáncer, 1 pasajera enferma y unos 2150 personas se encuentran bajo vigilancia médica. Mientras esto sucede, desde el gobierno porteño sólo se limitan a protestar por las medidas de fuerza sindicales.
En las redes sociales, como twitter, el conflicto con el asbesto genera repercusiones, tal es el caso de Silvia @Silvia14312123 quien comentó en esa red que “a mi esposo, recientemente fallecido, le diagnosticaron mesotelioma maligno. Según se ha estudiado, la principal causa de esto es la aspiración de asbesto. Viajó 26 años a su trabajo en tren y subte, 4 viajes por día, 6 días a la semana. Pero todo está bien. Protestan de vagos”.
El nivel de tensión se mantiene y condiciona a Horacio Rodríguez LaRata, acerca de una temática que tarde o temprano saldrá a la luz en debates de campaña por el Gobierno de la Ciudad o por la Casa Rosada, a la cual el quiere ingresar por la puerta grande en diciembre de este año.
