Una obra silenciosa, pero clave, avanza en el centro de Entre Ríos. ¿Por qué tantas miradas están puestas sobre la RN 18? ¿Qué impacto real tendrá en la región y en el Mercosur? Lo que parece solo una mejora vial es, en realidad, una jugada estratégica para transformar el movimiento de cargas en todo el Litoral argentino.
La Ruta Nacional 18 está en plena transformación para convertirse en autovía. Este cambio no solo busca mejorar el tránsito: su verdadero valor está en cómo va a conectar zonas productivas, puertos y rutas internacionales. Y lo mejor: está mucho más cerca de terminarse de lo que muchos imaginan.
Hoy los trabajos se concentran entre el arroyo Sauce Grande y Las Tunas. Se están construyendo nuevas calzadas, retornos, intersecciones, y reforzando puentes como Quebracho, Curupí y Espinillo. También hay obras en accesos clave como San Antonio, Seguí, Viale y la intersección con la Ruta Provincial 32. Todo esto apunta a un objetivo claro: mejorar la seguridad y la capacidad operativa del corredor.
Cuando la autovía esté lista, el transporte será mucho más ágil entre lugares como Viale, Villaguay y Colonia Avellaneda. Eso significa menos demoras, menos accidentes y menos costos logísticos. Para los productores y exportadores, es una mejora directa en su negocio. El beneficio no es solo para camiones: también para quienes viajan todos los días por esa ruta.
En términos simples: será más fácil y rápido mover granos, carne, maquinaria o productos industriales desde el corazón del país hasta los puertos del Litoral argentino. Y eso hace más competitiva a toda la región.
Pero el impacto no termina en Entre Ríos. La RN 18 forma parte de un corredor estratégico que conecta los puertos del Pacífico chileno con el sur de Brasil, cruzando por Argentina. Es el llamado corredor bioceánico central. Por ahí circulan productos que van y vienen de Asia, el Mercosur y otras partes del mundo.
Gracias a esta obra, el país mejora su posición como punto clave en el comercio entre océanos. Y eso abre la puerta a nuevas inversiones y más empleo en todo el centro y norte argentino.
La transformación de la RN 18 está dentro del plan nacional para modernizar rutas y mejorar la infraestructura. Según Vialidad Nacional, la idea es clara: hacer que mover cosas por el país sea más barato, más rápido y más seguro.
Mientras siguen las máquinas y los operarios trabajando, ya se empieza a ver cómo esta autovía se convertirá en una columna vertebral del transporte argentino.
