¿El Gobierno va a tener su propio programa para responder a los medios? La respuesta es sí, y ya tiene nombre, fecha y conductor. Pero lo más llamativo es que el título remite a un viejo ciclo muy polémico. ¿Coincidencia o mensaje directo?
El vocero presidencial Manuel Adorni anunció el lanzamiento de “Fake, 7,8”, un nuevo programa que se emitirá todos los viernes a las 13 hs por su canal de YouTube y por la TV Pública. La idea principal es desmentir noticias falsas y señalar coberturas que el Gobierno considera sesgadas o malintencionadas.
La palabra “Fake” apunta directo a las fake news, mientras que “7,8” recuerda al viejo programa 6,7,8, famoso durante el kirchnerismo por su tono militante. Pero acá el enfoque es distinto: Adorni dice que busca contar “la otra parte de la historia” y mostrar cómo algunos medios “tergiversan o directamente inventan información”.
El anuncio se hizo desde la cuenta de X del propio vocero, con un posteo corto que generó mucho ruido: “Mañana arranca Fake, 7,8. Fin.” Con eso solo, encendió debates en redes y medios.
Se transmitirá en vivo todos los viernes a las 13 hs por el canal de YouTube de @madorni.
Luego será retransmitido por otros canales de streaming y también por la TV Pública.
Buscará desmontar supuestas operaciones mediáticas y defender las políticas del Ejecutivo.
Formará parte de una estrategia más amplia de comunicación directa, sin intermediarios.
Desde que asumió el presidente Javier Milei, el oficialismo apostó fuerte a las redes sociales y a los canales digitales. No es casual que Fake, 7,8 nazca en ese ecosistema: no depende de los medios tradicionales y busca hablarle directo a la gente, sin filtros.
El lanzamiento llega en un momento tenso: el Congreso está trabado, hay cruces con gobernadores y muchas críticas mediáticas a medidas del Gobierno. Con este programa, la Casa Rosada busca tomar la iniciativa y controlar el relato desde su propio espacio.
Además, responde a una tendencia global: cada vez más gobiernos usan streaming y redes para comunicar sin depender de la prensa. El Ejecutivo argentino sigue ese camino, con un formato ágil y provocador.
Eso lo dirá el tiempo. Pero lo cierto es que Fake, 7,8 ya generó lo que buscaba: atención, debate y expectativa. En política, eso es mucho.
Si cumple su promesa de desmentir noticias falsas con datos, será un canal directo entre el Gobierno y la sociedad. Si cae en la confrontación sin argumentos, será más de lo mismo, con otro nombre.
El primer capítulo ya está en el aire. ¿Y vos, lo vas a mirar?