Con la mirada puesta en las elecciones de medio término y el rumbo a 2025, Jorge Macri ha tomado decisiones clave en su gabinete para fortalecer al PRO y adaptarse a los nuevos desafíos políticos. Esta serie de modificaciones, que involucra a figuras como Néstor Grindetti, Sergio Neiffert, y Ezequiel Daglio, marcan un giro importante en la estrategia del Gobierno porteño. Pero, ¿qué significa todo esto para el futuro de la Ciudad de Buenos Aires y el PRO?
En una semana de movimientos significativos, el lunes se confirmó que Diego Kravetz dejó la Secretaría de Seguridad para dar el salto a la Nación, donde asumirá como subsecretario de Inteligencia del Estado, en el segundo puesto de la SIDE, por debajo de Sergio Neiffert. Este cambio generó sorpresa, especialmente considerando la relevancia de la seguridad en el presupuesto proyectado para 2025. Ezequiel Daglio, quien hasta entonces lideraba la subsecretaría de Relaciones con la Comunidad, ocupará su lugar en la cartera de Seguridad, un área clave para el oficialismo.
Pero lo más trascendental es el movimiento de Néstor Grindetti, quien deja de ser el jefe de Gabinete porteño para asumir una nueva responsabilidad política. Según fuentes cercanas, Grindetti será el encargado de liderar una nueva secretaría que se encargará de las relaciones con la Nación, los gobernadores y los municipios. Esta modificación responde a la necesidad de Jorge Macri de que Grindetti se enfoque más en lo político y deje atrás la gestión diaria. Se espera que sea el principal nexo entre el Gobierno porteño y las diferentes fuerzas políticas, un rol clave para la estrategia del PRO a nivel nacional.
Aunque la salida de Grindetti se había hablado con antelación, el adelanto de la noticia se debió a filtraciones internas. El cargo de jefe de Gabinete será ocupado por Gabriel Sánchez Zinny, quien hasta hace poco se desempeñaba como vicejefe de Gabinete. Sánchez Zinny, de 50 años, tiene una amplia trayectoria dentro del PRO y es bien visto tanto por Jorge Macri como por su primo Mauricio Macri.
Este cambio en el gabinete forma parte de una estrategia más amplia de reestructuración para enfrentar los próximos desafíos electorales. Si bien la salida de Grindetti y la llegada de Sánchez Zinny son los principales movimientos hasta ahora, no se descarta que haya más cambios en otras áreas ministeriales. Se especula con modificaciones en carteras como la de la Movilidad, y en subsecretarías clave como la de la Mujer y Derechos Humanos. Además, se está evaluando la posibilidad de modificar la Ley de Ministerios y discutir una nueva Ley Electoral que podría alterar el calendario electoral, una decisión que recaerá en Jorge Macri como jefe de Gobierno.
En el contexto de estas modificaciones, el PRO busca fortalecer su posición en la Ciudad de Buenos Aires, un distrito que gobiernan desde hace 17 años. Aunque el peronismo parece ser una amenaza menor, La Libertad Avanza, bajo la conducción de Karina Milei, está ganando terreno. La llegada de Kravetz a la Nación es una señal clara de que el PRO se está adaptando a una nueva realidad política.
Cambiemos rumbo a 2025 es la consigna de Jorge Macri. A través de estos movimientos estratégicos, el PRO no solo busca consolidar su poder en la Ciudad, sino también prepararse para los desafíos de las elecciones venideras.
