Mientras el Gobierno de Javier Milei trabaja en la reconstrucción y modernización de las Fuerzas Armadas Argentinas, el Ministerio de Defensa está evaluando distintas opciones para incorporar drones MALE (Vehículos Aéreos No Tripulados de Gran Autonomía y Altitud Media).
Desde el comienzo de la actual administración, las áreas encargadas del planeamiento de capacidades y políticas industriales del Ministerio han explorado diversas alternativas para integrar estos sistemas aéreos no tripulados en las fuerzas armadas, considerando las opciones en negociación.
Una de las ofertas destacadas es la de Turquía, que propone colaborar en la producción del sistema ANKA, con la posibilidad de participación de empresas argentinas en la fabricación o ensamblaje del mismo. FAdeA podría ser clave en este proceso, con el objetivo de dotar a las tres ramas de las Fuerzas Armadas de una capacidad que actualmente es limitada en el país.
El ANKA, inicialmente previsto para patrullar el extenso litoral marítimo, también se está considerando para tareas de observación y vigilancia que podrían satisfacer las necesidades del Ejército Argentino y la Fuerza Aérea Argentina.
Por otro lado, la Fuerza Aérea Argentina está en conversaciones con empresas israelíes para un posible leasing de sistemas MALE. Se explora la opción de transferir sistemas de primera generación en desuso de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), aunque aún no se han especificado precios ni si estos sistemas cumplirán con los requisitos actuales de las Fuerzas Armadas argentinas. En caso de concretarse el leasing, la propiedad de los sistemas permanecería con la empresa proveedora y el contrato requeriría renegociación anual.
Además, existen ofertas para desarrollar y fabricar drones de pequeño y mediano tamaño en Argentina. Esta alternativa refleja una apuesta significativa por la modernización y autonomía tecnológica del país. Algunos sectores del Ministerio de Defensa respaldan el diseño y fabricación local de estos sistemas no tripulados, similar a lo que ocurrió con los radares. Consideran que Argentina podría abordar esta tarea con decisión política efectiva. No obstante, esta propuesta choca con la intención de realizar compras directas en el exterior.
Las necesidades actuales de la Fuerza Aérea Argentina en cuanto a sistemas aéreos no tripulados han sido evidentes durante mucho tiempo. Los proyectos de desarrollo local han fracasado debido a la falta de respaldo político y un marco de trabajo conjunto, resultando en tecnologías obsoletas y dificultades en la cadena de producción. En este contexto, las Fuerzas Armadas siguen buscando alternativas serias para incorporar capacidades modernas que cumplan con sus requerimientos operacionales.
Fuentes:
LaMovidaPlatense.com.ar, VisionPolitica.info, NoticiasEnsenada.info, CriticaArgentina.com.ar, PrimeraPagina.info