La inflación de octubre, con un 2,7%, generó reacciones positivas en los inversores locales. La noticia de que no se trató el rechazo al DNU sobre la deuda externa sumó al ambiente optimista. Junto con la posibilidad de desacelerar la devaluación, estos factores hicieron que los dólares financieros bajaran. A pesar de este panorama positivo, el DXY, que mide la fortaleza del dólar contra las principales monedas, subió un 0,37%, alcanzando su nivel más alto desde julio.
El dólar contado con liquidación (CCL) y el dólar MEP cerraron a la baja, mientras que los bonos soberanos registraron un aumento cercano al 1%, con el riesgo país cayendo 31 puntos. Sin embargo, los mercados emergentes enfrentaron un panorama diferente, con caídas en los índices EEM y de China, afectados por el fortalecimiento del dólar y el aumento de las tasas de los bonos del Tesoro estadounidense.
En contraste con las monedas de los principales socios comerciales de Argentina, que se ubicaron en sus mínimos históricos frente al dólar, la moneda argentina mostró señales de revalorización. A pesar de este alivio, las expectativas de los analistas no son del todo optimistas, y las comparaciones con épocas pasadas de bonanza económica persisten. Los bonos de provincias como Córdoba y las petroleras fueron altamente demandados, lo que impulsó el mercado local.
La baja inflación de octubre también favoreció una mayor demanda en la curva de bonos en pesos, con rendimientos que descendieron considerablemente. Las tasas de los LECAP y BONCAP se mantuvieron atractivas, especialmente las de corto plazo. Sin embargo, los bonos CER, ajustados por inflación, mostraron poca variación tras el anuncio de los datos del INDEC.
La Bolsa tuvo una jornada positiva, impulsada principalmente por acciones de empresas energéticas. Central Puerto, Transportadora Gas del Sur y Edenor destacaron entre los papeles más rentables del día. Los ADRs también experimentaron una suba, con Central Puerto liderando las ganancias. Los analistas esperan que esta tendencia continúe, aunque es posible que se presenten tomas de ganancias a corto plazo.
Aunque el mercado local experimentó una reacción favorable, la volatilidad sigue siendo un factor presente. La política económica del presidente Javier Milei, que contempla una desaceleración en la devaluación, mantiene en vilo a los inversores. Sin embargo, el "carry trade" sigue siendo una estrategia atractiva, y las inversiones en pesos siguen siendo vistas como una opción segura a corto plazo.