En un panorama político cada vez más tenso en Santa Cruz, surge una gran pregunta: ¿Qué está pasando con la imagen de Pablo Grasso, el Intendente de Río Gallegos? Los últimos sondeos de opinión dejan claro que su popularidad está cayendo a niveles preocupantes, mientras que su principal rival, el Gobernador Claudio Vidal, parece mantenerse a flote con una imagen más estable. ¿Qué está detrás de esta debacle política?
Una reciente encuesta realizada por CB Consultora revela que la imagen positiva de Pablo Grasso ha caído estrepitosamente en los últimos meses. Según el estudio, realizado con 691 personas en Santa Cruz, la aprobación de Grasso se redujo a un 37,5% en febrero de 2025, un descenso considerable desde el 44,7% que registraba el Gobernador Claudio Vidal. Si comparamos con los números de abril de 2024, cuando Grasso alcanzaba un 49,1% de imagen positiva, la caída se vuelve aún más alarmante: 11,6 puntos en solo 10 meses.
¿Qué está detrás de esta caída? Las denuncias por corrupción y la falta de transparencia en la gestión de Pablo Grasso parecen estar jugando un papel crucial. Entre las principales acusaciones contra él se destacan:
Estos problemas han afectado gravemente la confianza de la ciudadanía, contribuyendo al desgaste de la imagen de Pablo Grasso.
Con la caída en las encuestas y las denuncias que lo persiguen, el futuro político de Pablo Grasso parece cada vez más incierto. La falta de transparencia y las acusaciones de corrupción han generado un clima de desconfianza que podría costarle caro en las próximas elecciones.
Por su parte, Claudio Vidal, con una imagen más estable, podría capitalizar esta situación, consolidándose como una opción más confiable para los votantes de Santa Cruz. La incertidumbre sobre el futuro de Pablo Grasso crece, y los próximos comicios podrían definir si logra mantenerse en el poder o si, por el contrario, su caída es irreversible.
En conclusión, el descenso en las encuestas es solo una manifestación de una crisis política más profunda que podría poner en riesgo la carrera de Pablo Grasso en Santa Cruz. Las denuncias de corrupción y la falta de transparencia en su gestión parecen ser factores clave en su declive, generando un ambiente de incertidumbre sobre su futuro en la política provincial.