La reciente elección de Mariano Llorens como presidente de la Cámara Federal ha sacudido el ámbito judicial, especialmente por su implicancia directa en la Corte Suprema. La jugada política es de enorme trascendencia, ya que, con esta posición, Llorens se convierte en conjuez de la Corte Suprema, rompiendo con una tradición histórica y generando un nuevo escenario en el sistema judicial argentino.
Pero, ¿qué significa que Mariano Llorens sea elegido presidente de la Cámara Federal? ¿Por qué su rol en la Corte Suprema es tan importante? A continuación, te lo explicamos de manera sencilla.
Ser conjuez de la Corte Suprema significa ser parte del máximo tribunal en casos en los que se requiera un juez adicional para garantizar la imparcialidad de las decisiones. Mariano Llorens, con su nombramiento como presidente de la Cámara Federal, obtiene automáticamente este estatus, según lo dispuesto por la reciente reglamentación de la Corte.
Esta posición le permite estar en el centro de una intensa lucha política entre los sectores judiciales más cercanos al gobierno y aquellos vinculados con el macrismo. La relación entre Llorens y Macri es conocida por su cercanía, lo que genera suspicacias sobre cómo se desarrollarán las próximas decisiones judiciales.
La Corte Suprema había quedado reducida a solo tres jueces tras la salida de Maqueda, creando un vacío de poder. La elección de Mariano Llorens como presidente de la Cámara Federal refuerza el bloque liderado por Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, quienes se oponen a Ricardo Lorenzetti, considerado cercano al peronismo. Con este nuevo panorama, Llorens se alinea con sectores judiciales más vinculados a la oposición, en un momento de gran tensión política y judicial.
La decisión de mantener a Llorens como conjuez de la Corte también tiene un trasfondo en la lucha interna entre los sectores judiciales. A pesar de que debería haber dejado ese cargo, su nombramiento como presidente de la Cámara Federal le permite seguir en funciones, algo que no pasa desapercibido en el contexto de las disputas judiciales.
El vínculo de Mariano Llorens con el expresidente Macri es claro. En 2022, Llorens se excusó de intervenir en las causas por espionaje ilegal del macrismo, citando razones de "decoro y delicadeza". Sin embargo, esta cercanía se ha visto reforzada con su rol como presidente de la Cámara Federal. La Cámara Federal, que tiene dos salas, tiene un reparto de poder que ha sido tradicionalmente influenciado por el macrismo.
El nombramiento de Llorens como presidente de la Cámara Federal y su rol como conjuez de la Corte Suprema no solo afectan al ámbito judicial, sino también a la política argentina. En este momento, las tensiones entre los sectores más cercanos al gobierno y aquellos ligados al macrismo están más intensas que nunca.
Mientras tanto, el presidente de la Cámara Federal tiene la potestad de definir cuestiones clave de competencia judicial, lo que otorga un poder significativo sobre el destino de diversas causas. La situación de Llorens, junto con la reciente decisión de Farah de cambiar su voto, deja claro que el juego judicial está en constante movimiento y con repercusiones directas sobre el futuro político del país.
Este giro en la Cámara Federal y el nombramiento de Mariano Llorens como conjuez de la Corte Suprema marcan un nuevo capítulo en la lucha por el control de la justicia en Argentina.
