Algo grande está pasando con las operaciones en dólares en Argentina. En solo cuatro meses de 2025, las transferencias en moneda extranjera se dispararon un 357%. Pero eso no es todo: hay un cambio silencioso que podría transformar la forma en que usamos los dólares todos los días. ¿Qué hay detrás de este boom?
Según datos de la empresa Coelsa, el sistema financiero argentino registró un récord histórico en cantidad de transacciones en dólares. Es la primera vez que se publica este dato separado del total general, lo que permite ver con claridad cómo crecen estas operaciones.
¿Por qué ahora? Una de las claves está en el blanqueo de capitales que se hizo en 2024. Ese proceso incorporó más de USD 20.000 millones al circuito formal, y buena parte de esos fondos ahora se mueven a través de transferencias bancarias. Esto explica en parte por qué las transferencias crecieron de manera tan brusca.
Pero hay más: en marzo, el Banco Central habilitó algo novedoso para la vida cotidiana. Ahora se pueden usar tarjetas de débito en dólares para hacer compras dentro del país. Al principio parecía una medida aislada, pero ya empieza a notarse en rubros como el turismo y algunos comercios que aceptan la moneda extranjera.
En paralelo, también aumentó fuerte la actividad entre personas: la cantidad de transacciones entre cuentas subió un 84%, y el volumen total de dinero movido (en todas las monedas) creció un 20%. Todo indica que la gente está usando más el sistema financiero, y lo está haciendo con dólares.
El plan del Gobierno: menos trabas, más libertad
Desde el equipo económico de Luis Caputo, dejaron en claro que no habrá un nuevo blanqueo formal, ya que eso requiere una ley. Pero el objetivo es abrir el juego: que quien ya tiene dólares los pueda usar sin tantas vueltas. Por eso se están revisando regulaciones del BCRA y la AFIP para achicar la carga de papeles que hoy exigen contadores, escribanos y bancos para validar operaciones en moneda extranjera.
El presidente Javier Milei también habló del tema: dijo que en ventas como las de un auto en dólares, los impuestos seguirán cobrándose en pesos. Así, buscan que los dólares circulen más libremente sin perjudicar la recaudación.
Además, anunciaron que van a eliminar exigencias como justificar el origen de los dólares o demostrar cómo creció tu patrimonio. Eso sí: todo dentro del marco del GAFI, el organismo internacional que monitorea los flujos financieros para evitar el lavado de dinero. La UIF seguirá funcionando con controles, pero se esperan cambios en la ley Penal Tributaria.
Las operaciones en dólares no solo aumentaron, sino que ya son parte del nuevo día a día económico. La cantidad de transacciones crece, las trabas se aflojan y el sistema bancario empieza a adaptarse a una Argentina que, cada vez más, se mueve en dos monedas. ¿Hasta dónde llegará esta tendencia? Esa respuesta, todavía está abierta.