En el contexto del plan de reducción del Estado y del gasto, el presidente Javier Milei planea una reestructuración contundente de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en las próximas semanas. Esta medida incluye el recorte de puestos jerárquicos en el organismo, cuyos salarios oscilan entre 14 y 32 millones de pesos mensuales.

La AFIP ha llevado a cabo más de 100 controles sorpresivos para monitorear el precio de los cigarrillos. Según fuentes cercanas al presidente, se espera que en breve se emita un decreto o resolución que modifique varios aspectos de la entidad, actualmente dirigida por Florencia Misrahi.

El enfoque estará en revisar las posiciones de subdirectores generales de áreas clave como la Dirección General de Aduanas, la Dirección General Impositiva y la Dirección de Recursos de la Seguridad Social. Los funcionarios en estas categorías reciben sueldos superiores a los 14.700.000 pesos, considerando tanto la remuneración básica como un complemento salarial especial.

Este complemento, establecido en 1997, permite a los empleados de alto rango de la AFIP percibir hasta el 0,60% de la recaudación bruta total de los gravámenes y recursos de la seguridad social gestionados por el organismo. La “cuenta de jerarquización”, según el Decreto 618/97, se distribuirá entre el personal de la AFIP siguiendo pautas del Poder Ejecutivo y bajo la supervisión de la Comisión Técnica Asesora de Política Salarial del Sector Público.

La AFIP cuenta con un total de 21.660 empleados distribuidos en nueve subdirecciones generales. Los altos salarios son una constante, siendo Florencia Misrahi la que recibe uno de los más elevados, con más de 32.180.328 pesos, mientras que otros altos cargos tienen sueldos que superan los 17.201.402 pesos.

Inicialmente se especuló que el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, lideraría este proceso de reestructuración; sin embargo, fuentes cercanas a su entorno han desmentido su involucramiento, sugiriendo que la iniciativa proviene del Ministerio de Economía, dirigido por Luis “Toto” Caputo.

La AFIP representa una carga considerable en la estructura del gasto público, siendo uno de los organismos más grandes dentro de la Administración Pública Nacional (APN). Su rol como entidad clave en la recaudación fiscal es fundamental, y la remuneración promedio en la AFIP hasta junio era de aproximadamente 900.000 pesos mensuales, posicionando a sus empleados entre los mejor remunerados del sector público.

Además, empleados de niveles medio y bajo también reciben una parte importante de su sueldo en función de la recaudación, donde el salario básico representa solo el 20-30% del total mensual, variando según el porcentaje asignado a la recaudación.

Recientemente, el Gobierno anunció la eliminación de cuatro regulaciones aduaneras, con la expectativa de mejorar la rentabilidad y tipo de cambio para importadores y exportadores. La titular de la AFIP destacó que estas medidas no contribuían al control ni a la recaudación.

En un giro adicional, la AFIP comenzará a implementar la devolución de percepciones por compras en moneda extranjera, afectando a cerca de 300.000 contribuyentes. Este proceso de reintegro, que incluye capital e intereses devengados, está programado para iniciar en octubre y se llevará a cabo de forma escalonada durante seis meses.