La carrera presidencial de Juan Schiaretti ha dado un nuevo giro al ganar primero la provincia de Córdoba y luego la intendencia de la enorme ciudad capital. También, al anunciar que se abre la posibilidad de un acuerdo post PASO con Horacio Rodríguez Larreta y el radicalismo de Juntos por el Cambio.
El gobernador de Córdoba busca enterrar al kirchnerismo y se presenta como un participante con pocas chances de llegar a la Casa Rosada, pero con un potencial de construir poder en caso de superar el 1,5% en las PASO.
Las encuestas en Córdoba lo ubican como líder en intención de voto para el tramo presidencial, lo que le permitiría tener un buen rendimiento en la provincia y una presencia legislativa en el Congreso en un escenario de empate virtual de mayorías.
Además, si alcanza un mayor éxito, Schiaretti podría construir una cartera de poder que ofrecer en caso de que la oposición acceda al gobierno, lo que le daría un mayor protagonismo y la posibilidad de ser un factor determinante en un eventual balotaje.
Sin embargo, el oficialismo nacional, liderado por Sergio Massa, ha preparado un armado en Córdoba para enfrentar el potencial problema de Schiaretti. Intendentes del interior cordobés apoyarán a Larreta y buscarán reducir el poder de voto del schiarettismo, bloqueando así un espacio que podría ser determinante en un balotaje moderado.
Compartimos todo el trabajo que hacemos junto a los productores agropecuarios, en la Sociedad Rural de #RíoCuarto. Así como en #Córdoba funciona la articulación público-privada con los sectores del campo, también podemos hacerla funcionar en el país. #LevantemosArgentina pic.twitter.com/l2LFINFhJj
— Juan Schiaretti (@JSchiaretti) July 19, 2023
Todo este escenario evidencia la importancia que la provincia de Córdoba adquiere en la elección presidencial y cómo los distintos actores políticos se posicionan para obtener el apoyo clave de esta región del país.