En su última aparición como gobernador de Córdoba ante empresarios del círculo rojo en la Bolsa de Comercio local, Juan Schiaretti enfatizó la importancia del equilibrio fiscal para el progreso de las sociedades. Acompañado por su ministro de Finanzas, Osvaldo Giordano, futuro director de Anses en el gobierno de Javier Milei, Schiaretti elogió la postura del presidente electo respecto a esta cuestión.
Schiaretti destacó la eficiencia fiscal de Córdoba, siendo la provincia con la menor cantidad de empleados públicos por cada mil habitantes y el menor peso legislativo en el presupuesto. Atribuyó el equilibrio fiscal provincial a la reducción de empleados públicos y la disminución de impuestos.
El gobernador saliente defendió la financiación de obras públicas mediante créditos, subrayando que las obras en Córdoba se realizaron mayormente con recursos propios, señalando la falta de inversión nacional en proyectos clave. Criticó la paralización de la autopista San Francisco-Córdoba y resaltó la necesidad de mantener el equilibrio en las empresas públicas.
En su discurso, Schiaretti confrontó la idea de que las obras públicas se detendrán, argumentando que en Córdoba, estas ya están paralizadas, subrayando la situación de la autopista acordada hace ocho años con la Nación, sin avances significativos.