¿Puede un Gobierno cambiar el rumbo económico sin el apoyo del Congreso? Esa fue la pregunta que flotó en el aire durante la 15° edición del Congreso de Desarrollos e Inversiones Inmobiliarias, donde Luis Caputo, ministro de Economía, dejó en claro su postura y apuntó directo a la casta política y al empresariado.
Luis Caputo aprovechó su discurso para respaldar las políticas del Gobierno de Javier Milei y destacó que el objetivo es mantener el equilibrio fiscal, reducir impuestos y avanzar en la desregulación. “La estabilidad macro es fundamental porque genera inversión a largo plazo”, dijo frente a desarrolladores y empresarios.
El funcionario también repasó los logros de los últimos 18 meses y no esquivó críticas al kirchnerismo, al que responsabilizó por el deterioro económico de décadas anteriores. Según Caputo, la oposición aprueba leyes que luego son vetadas para desestabilizar, afectando directamente el equilibrio fiscal que, asegura, es clave para consolidar el rumbo económico del país.
Sobre el Congreso, el ministro fue contundente: “Se requiere un Congreso más acorde a lo que queremos hacer. En Economía estamos estudiando medidas para impulsar este sector y otros, pero sin leyes, no se puede avanzar”. Con estas palabras, buscó movilizar al empresariado y a los privados para que se comprometan con el proyecto de crecimiento que impulsa el Gobierno.
En materia de deuda, Caputo señaló que el Ejecutivo ha cancelado obligaciones con el mercado y organismos multilaterales, evitando la acumulación excesiva de reservas y generando mayor estabilidad para las inversiones. Su mensaje a los empresarios fue directo: “Ustedes tienen el capital, pueden hacer el desarrollo, mover la economía. Esta vez es diferente”.
El ministro insistió en que la apertura de mercados y la competencia son fundamentales para mejorar el acceso a bienes y servicios, y remarcó que la oportunidad actual es histórica: “Ya no son promesas, son resultados”.
Si te preguntás cómo influye esto en tu día a día, la respuesta está en que las decisiones de Luis Caputo y el Gobierno afectan la inversión, los empleos y la disponibilidad de servicios. Entender este rumbo económico es clave para cualquier ciudadano o empresario que quiera planificar su futuro.
Y aunque el Congreso sigue siendo un obstáculo, el mensaje del Gobierno es claro: cambiar la Argentina requiere un compromiso conjunto entre la política y el empresariado, y la oportunidad para hacerlo nunca fue tan grande.