Una elección inesperada acaba de cambiar el tablero político en el norte del país. Pero, ¿cómo pasó? ¿Qué rol jugó La Libertad Avanza? Seguí leyendo, porque lo que pasó en Chaco puede marcar una tendencia nacional.
En las legislativas del 11 de mayo, la alianza entre el oficialismo chaqueño y los libertarios arrasó en las urnas. Con el 74% de las mesas escrutadas, la coalición Chaco Puede + La Libertad Avanza sacó el 45% de los votos. Le sacaron más de 11 puntos al peronismo local que comanda el exgobernador Jorge Capitanich, que quedó segundo con apenas 33,63%.
Más atrás quedó el espacio kirchnerista Frente Primero Chaco, liderado por la intendenta de Barranqueras, Magda Ayala, que apenas cosechó un 11,35%. Un dato que sorprendió hasta a los propios.
Este triunfo tiene un condimento clave: es la primera vez que un gobernador provincial —en este caso Leandro Zdero— formaliza una alianza con La Libertad Avanza, el partido que a nivel nacional conduce Javier Milei. No es un detalle menor: marca el desembarco firme del espacio libertario en el interior profundo, más allá de CABA y Provincia.
Lo que pasó en Chaco también pone sobre la mesa un modelo de cogobierno provincial-nacional. ¿La receta? Baja de impuestos, equilibrio fiscal, menos gasto público y más transparencia. Así lo vienen planteando desde LLA, y ahora lo están empezando a ejecutar con poder real en provincias como esta.
La jornada electoral transcurrió sin mayores sobresaltos. Hubo algunas denuncias menores —como mesas sin autoridades presentes— pero no alteraron el resultado. Lo importante es que el mensaje fue claro: una mayoría de chaqueños eligió un cambio.
Y eso tiene eco más allá de las fronteras de la provincia. Este resultado se suma a lo que pasó en Salta, donde los libertarios también metieron buenos números. El mapa político se está moviendo, y La Libertad Avanza se perfila como la principal oposición a los oficialismos locales en varias provincias.
En resumen: lo de Chaco no fue solo una elección más. Fue una señal. El poder de Jorge Capitanich ya no es el de antes. Y el experimento político de Chaco Puede con La Libertad Avanza podría replicarse en otros distritos.
¿Estamos ante un nuevo modelo de poder provincial? ¿Se viene una ola libertaria en el interior? Esa historia todavía se está escribiendo. Pero todo indica que esto recién empieza.