¿Qué pasaría si en la provincia de Buenos Aires se votara con una sola boleta para todos los partidos? Esa es la pregunta que buscan responder dos senadores libertarios con un nuevo proyecto de ley que promete cambiar la forma de votar en el distrito más grande del país.
Los senadores Carlos Curestis y Daniela Reich, referentes de La Libertad Avanza, presentaron formalmente una propuesta para que en la provincia se implemente la boleta única de papel (BUP), el mismo sistema que ya se usa a nivel nacional. Aseguran que este cambio “empareja la competencia electoral” y “pone fin al clientelismo político”, dos temas que históricamente generaron polémica en los comicios bonaerenses.

Según explicaron Curestis y Reich, la boleta única de papel permite que todas las fuerzas políticas estén representadas en un mismo documento, impreso con igual tamaño y orden definido por sorteo. “Con este sistema, todos los candidatos compiten en igualdad de condiciones y se evita el robo de boletas, una práctica que distorsiona la voluntad popular”, sostuvieron.
Además, remarcaron que el uso de una sola boleta implicaría un ahorro económico importante, ya que no sería necesario imprimir millones de boletas por cada partido, sino un único modelo por mesa. “Es más transparente, más económico y más justo”, afirmaron.
El debate por la boleta única no es nuevo, pero ahora vuelve a ganar fuerza en el escenario político bonaerense. En Nación, el sistema debutó en las últimas elecciones legislativas del 26 de octubre, y muchos lo consideraron un paso hacia la modernización del proceso electoral.
En la provincia de Buenos Aires, el tema abre también una discusión política profunda. Por un lado, el gobernador Axel Kicillof decidió desdoblar las elecciones y mantener el sistema tradicional, lo que generó tensiones internas en el peronismo. Desde el sector de Cristina Fernández de Kirchner se impulsaba la idea de realizar comicios concurrentes, aunque con sistemas distintos. Finalmente, el oficialismo bonaerense celebró sus elecciones en septiembre, con una victoria clara a nivel provincial, aunque luego perdió en el plano nacional.
Del lado libertario, la BUP también trajo sus propias turbulencias. Durante las elecciones nacionales, la candidatura de José Luis Espert enfrentó un escándalo judicial que dejó al partido sin posibilidad de reimprimir las boletas, generando un fuerte dolor de cabeza en la recta final de la campaña.
Con este nuevo proyecto, Curestis y Reich buscan trasladar la experiencia nacional al ámbito provincial. “Queremos que los bonaerenses voten con las mismas reglas que el resto del país”, señalaron.
El debate recién empieza, pero la pregunta queda abierta: ¿llegará la boleta única de papel a la provincia más poblada de Argentina?