¿Qué pasa cuando un Presidente echa a más de 139 funcionarios en menos de un año y medio? En la gestión de Javier Milei, eso no es crisis: es decisión. La limpieza del Gabinete nacional sigue a toda máquina, y cada salida cuenta una historia.
Este post te explica por qué el Gobierno de Milei está sacando funcionarios y cómo eso marca una nueva forma de hacer política en Argentina.
El último en irse fue Franco Mogetta, que manejaba la Secretaría de Transporte. Su salida no fue sorpresa: venía con ruido interno y quedó afuera como parte de un recambio más grande. ¿El objetivo? Un equipo más chico, más leal y más eficiente.
Pero Mogetta no es el único. La lista es larga y pesada. Ya son más de 139 cargos políticos los que quedaron vacantes desde que Milei llegó a la Rosada. Y entre los nombres más conocidos está el del exjefe de Gabinete Nicolás Posse, que se fue en mayo de 2024. Su despido fue clave: marcó que en este Gobierno no hay lugares asegurados, ni para los que arrancaron el camino con él.
También se fue la excanciller Diana Mondino, tras semanas de internas. A ella se suman varios otros nombres que muestran que la vara está alta: o cumplís, o te vas.
Un ejemplo claro fue Osvaldo Giordano, exjefe de la Anses, que salió volando después de que su pareja, diputada, votara contra la Ley Ómnibus. No fue un gesto menor: para Milei, el proyecto está por encima de cualquier vínculo personal.
En el área de medios, hubo una rotación llamativa: pasaron por la Secretaría de Medios Eduardo Roust, Belén Stettler y Eduardo Serenellini, todos con pasos breves. En la Secretaría de Trabajo, la historia fue parecida: Horacio Pitrau cayó por acercarse a gremios tradicionales, y Omar Yasín fue desplazado por un aumento salarial cuestionado.
En el frente social, la ministra Sandra Pettovello mostró firmeza. Separó a Pablo de la Torre por irregularidades con alimentos sin distribuir y contratos con organismos internacionales. Su reemplazo, Yanina Nano Lembo, también duró poco. La ministra avanzó con más cambios: sacó a varios funcionarios que no estaban a la altura.
Otros nombres que se fueron: Julio Garro (por un comentario polémico sobre Lionel Messi), Ignacio Yacobucci (de la UIF), Fernando Vilella, Alejandro Consentino y Florencia Misrahi. Todos con salidas que responden a un mismo mensaje: nadie es imprescindible.
El Ministerio de Economía, según un informe del sociólogo Pablo Salinas, es el que más cambios tuvo: 43 recambios. Le siguen Capital Humano (27), Jefatura de Gabinete (17) y la Presidencia (11).
Incluso fue desplazada Sonia Cavallo, hija del exministro Domingo Cavallo. Pese a su cercanía ideológica con Milei, su apellido no alcanzó para quedarse.
¿Y ahora qué sigue? Esa es la pregunta que queda abierta. Pero algo es claro: Javier Milei no piensa frenar. El que no se alinea, se va.